Aunque la cerveza llegó a Barcelona en tiempos romanos, su historia comenzó a consolidarse durante la Edad Media, cuando los monasterios se convirtieron en centros de producción. Con el tiempo, la bebida ganó popularidad, convirtiéndose en un elemento imprescindible en tabernas y cafés.
Hoy, Barcelona es un referente en la escena cervecera, con marcas emblemáticas como Moritz, fundada en 1856, y Estrella Damm, desde 1876. Además, la ciudad alberga una vibrante oferta de cervecerías artesanales y espacios únicos, como Garage Beer Co., conocido por sus innovadoras creaciones, BlackLab Brewhouse, con su fusión de sabores locales y americanos, o BierCaB, que combina un ambiente moderno con una excelente selección de cervezas. Estos son solo algunos ejemplos de la rica y diversa escena cervecera que Barcelona tiene para ofrecer.